Tomás siempre será el mar
El mar en su sentido más salvaje y luminoso. El mar risueño y cálido. Bohemio y contemplativo. Esa masa de agua azul infinita que sólo […]
El mar en su sentido más salvaje y luminoso. El mar risueño y cálido. Bohemio y contemplativo. Esa masa de agua azul infinita que sólo […]
En Cuba, las bodegas distribuyen algunos productos básicos que se venden a través de la llamada «Libreta de Abastecimiento». Allí, los cubanos pueden adquirir productos como jabón,
Te imaginas el día que muera Fidel…?», me dijo Tomás una tarde de diciembre, en un tono de profunda angustia. Fue a fines del 2001, cuando
“Subamos entonces y lo escuchamos en mi pieza”, le dijo mi madre a fines del 1982 a su amiga, la arquitecta, mientras ambas de manera
–Hace demasiado calor, le dije una tarde pegajosa de febrero a Tomás, allá por el 2006, algo abrumada ante la falta de vacaciones. –Si chica…,
Es que no podemos tener tanta suerte. Fijate que todo coincide en este viaje: el posgrado de género, la marcha de las antorchas, la Celac
–“¿Y cuánto tiempo piensan estar por el interior?” – “Supongo que unos quince días”, le respondí con cierta naturalidad. Era mi primer viaje a Cuba.
Fue la pregunta que me lanzó Tomás una mañana calurosa de junio, mientras desayunábamos juntos, allá por el año 2000 en La Habana. – Claro, le respondí sonriendo